La Tolentino

Mi foto
Guadalajara, JALISCO, Mexico
Creativa Plastica. Artista Emergente. Venta de Arte.

sábado, 21 de abril de 2012

ENTREVISTA Suplemento OCIO. Una Mirada Surrealista



Una mirada surrealista
Artes Plásticas
La obra de Gabriela Tolentino está cargada de un lenguaje poético que hechiza a quien se cruza con su arte, y le provoca reacciones contrastantes
Por  Luis Addams Torres
La tapatía Gabriela Tolentino es una artista plástica conocida por su labor en la pintura, aunque sus alcances aún tienen mucho por explorar, es inquieta y acercarse a ella, es una experiencia de aprendizaje. Su obra impone, la capacidad de desarrollar una narrativa a través de formas inverosímiles y cobrar vida al momento que alguien se para frente a ellas predisponen a alguien inalcanzable. Sin embargo, Tolentino se muestra cálida, agradable e interesada en conversar y despejar dudas de quien se acerca a ella, y en este caso se tomó unos minutos para una entrevista que se convirtió en plática cordial.
“Mi antecedente más viejo corresponde a mi hermana mayor”, comenzó a relatar sobre sus orígenes, “ella me dice que yo quería ser gimnasta o pintora, y en gimnasia la verdad no era buena, entré muy grande y aunque me gustaba mucho, nunca destaqué y eso me frustró un poco. Y la pintura no es que haya empezado, creo que todos lo hacemos, simplemente algunos no lo dejamos”. El gusto personal tomó forma y se encaminó a una carrera al salir de la preparatoria, “metí papeles para mercadotecnia al terminar la prepa y no salí, le dije a mi papá e insistió en psicología o mercadotecnia, pero le dije que ya había salido en listas para artes plásticas y me apoyó”, dice la artista sonriente, mientras da un sorbo a su taza, “tenía mucha ilusión, en una ocasión entré en la clase de Jesús Camacho y nos dijo, que no nos pasara lo que a una chica que acababa de titularse, regresó y le dijo ‘¿y ahora qué maestro?’. Ahí fue cuando lo tomé muy en serio”, cuenta Tolentino, hace una pausa, y baja la mirada, como si el recuerdo se hubiera proyectado en su mente, “me di cuenta que los maestros tenían esa flama de interés por enseñar, aunque en ocasiones tenías que insistirles para sacarles información. Al estudiar en el [Instituto Cultural] Cabañas hubo una gran diferencia, todo creativo y experimental. Eran maestros que ya exponían, vivían de sus proyectos personales”.
Su aprendizaje y encuentro con su propia voz no fue sencillo, “me llegaron a decir que no hay nada nuevo bajo el Sol, y eso se me hizo muy grave. Me gusta pensar que debemos seguir buscando en la trinchera que estés, lo conceptual, el hiperrealismo”, y en esa búsqueda, la maternidad le dio un giro a su obra, “con mi hija cambió mi forma de trabajar, antes de ella mis obras mostraban mujeres que rayaban en el libertinaje de manera sutil, ahora para predicar con el ejemplo, pongo atención de lo que quiero expresar y mostrar. Ahora veo a través de sus ojos, su inocencia, el candor y ternura. Quiero contarle a ella lo que es la sociedad, recordando cómo yo veía el mundo en esa etapa”.
Este año Tolentino sólo quiere hacer exposiciones colectivas para darse el tiempo de terminar sus nuevas obras en donde se empapa de la música, “quiero que se maceren, crezcan”, y presenta su trabajo desde hace siete años en la glorieta Chapalita lo cual le ayuda a calibrar su trabajo con la gente ajena a las galerías.


Un dato
Tolentino ha realizado portadas para los libros Los encuentros de Pérez, de Jorge Leroux, y Sola, sin tu sombra, de Elia Casilla


La frase
“La pintura ha sido la llave para conocer mi interior y mis alcances”